Un testigo denunció a Grobbelaar por venganza y dinero

El testigo principal en el juicio contra Bruce Grobbelaar y otras tres personas acusadas de amañar partidos en la Liga inglesa declaró ayer que quería sacar la mayor cantidad de dinero posible del caso al mismo tiempo que aplastar al ex portero del Liverpool Grobbelaar. Chris Vincent, antiguo amigo y socio de negocios del guardameta efectuó una grabación secreta en vídeo mientras, según el fiscal, Grobbelaar admitía amañar partidos a cuenta de una mafia de apuestas del extremo oriente.Interrogado por el defensor de Grobbelaar, Rodney Klevan, Vincent reconoció que lo que el quería era vengarse del futbolista porque una empresa que montó a medias con Grobbelaar dedicada a los safaris en Zimbabue quebró cuando el portero retiró los 13 millones de pesetas que había invertido en ella. "Por lo tanto, ¿usted pensaba matar dos pájaros de un tiro, ganar económicamente y destruir a Grobbelaar?", preguntó el abogado. "Correcto", respondió Vincent, cuyas cintas de vídeo son la principal prueba de la acusación.

Vincent añadió que Grobbelaar le dijo que otro de los implicados en el juicio, el ex futbolista del Wimbledon John Fashanu -acusado de ser uno de los intermediarios de la mafia- había fichado sorprendentemente por el Aston Villa en 1994 porque amañar partidos se había vuelto peligroso.

En el banquillo de los acusados también se sientan el empresario malayo Heng Suan Lim, presunto intermediario, y el exportero del Wimbledon Hans Segers. Los cuatro acusados se declararon inocentes.

En una de las cintas de Vincent puede verse a Grobbelaar aceptando 2.000 libras (unas 400.000 pesetas) en billetes mientras Vincent le decía que provenían de otra mafia de apuestas que quería que amañara partidos. Vincent dijo en el juicio que le prometió a Grobbelaar que la hipotética mafia le pagaría 2.000 libras cada quincena por predecir los resultados de los partidos aparte de 100.000 libras más (unos 20 millones de pesetas), por amañar cada partido.

Según el fiscal, Grobbelaar intentó amañar cuatro partidos para la mafia mientras defendía la portería del Liverpool y el Southampton. Vincent dijo que él estaba con Grobbelar cuando el Úortero recibió 40.000 libras (unos ocho millones de pesetas) por dejarse golear en 1993 en un Newcastle-Liverpool.