El presidente de Ceuta alerta a Interior sobre el alto numero de emigrantes ilegales

El presidente de la ciudad de Ceuta, Basilio Fernández, ha remitido un escrito al ministro del Interior, Jaime Mayor, en el que le muestra su preocupación por la ralentización de la salida de los inmigrantes ilegales y la reducción del número de los efectivos de la Guardia Civil que controlan la frontera con Marruecos. Durante los últimos meses se ha podido detectar un aumento incontrolado de los inmigrantes subsaharianos en el campamento ceutí de Calamocarro. Incluso muchos de los ilegales que se encontraban en la llamada "zona de tierra de nadie" han logrado llegar hasta la ciudad. Según la Consejería de Bienestar Social, en Calamocarro se encuentran ya 305.

El presidente ceutí manifiesta al ministro la necesidad de aumentar las ayudas que, por el momento, se vienen prestando a los inmigrantes, especialmente para evitar que puedan producirse de nuevo incidentes similares a los que hubo el 11 de octubre del pasado año.

Fernández concluye su misiva con el ruego a Mayor de que adopte las medidas necesarias en el ámbito de su competencia y le adjunta una copia de la carta que, con idéntico motivo, envió recientemente al nuevo delegado del Gobierno.

El 11 de octubre de 1995 Ceuta vivió una jornada sangrienta cuando más de dos centenares de inmigrantes ilegales organizaron un motín, para exigir el paso a la Península, con barricadas y lanzando piedras. Un policía recibió un balazo en un pulmón y dos inmigrantes resultaron gravemente heridos.