Getafe Norte no consigue su suelo después de tres años de pleitos

Los adjudicatarios de las 3.000 viviendas de protección oficial de Getafe Norte pueden respirar tranquilos. El consorcio urbanístico que gestiona el desarrollo del nuevo barrio de la ciudad (144.600 habitantes) logró culminar la semana pasada la inscripción a su nombre de todos los terrenos tras un farragoso proceso jurídico que se ha prolongado durante más de tres años. El anuncio se produce justo cuando algunos grupos de cooperativistas, exasperados por el retraso de sus escrituras, amenazaban con movilizaciones inminentes.

Las distintas cooperativas que participan en la operación han comenzado ya a escriturar sus parcelas. Los futuros ocupantes de las viviendas tienen vía libre para gestionar sus hipotecas. Y las constructoras pueden empezar a edificar sin mayores temores.

El gerente de Getafe Norte, Pedro Gómez, se mostraba ayer aliviado tras culminar su "primera gran tarea", que calificó de "complejísima". Los acuerdos con los anteriores propietarios del suelo presentaron serias dificultades, pero al final el 85% de los mismos han aceptado las condiciones. En los casos restantes, el jurado de expropiaciones habrá de fijar el precio justo.

El malestar de los futuros residentes se centra ahora en el encarecimiento de sus pisos en medio millón de pesetas a causa de la pésima calidad geológica del terreno. Entre los damnificados se encuentra el propio Ayuntamiento, ya que allí se construirán una plaza de toros y una piscina cubierta municipales.