TVE pretende enganchar al público femenino con 'Juntas pero no revueltas'

Tres mujeres maduras, que hablan continuamente de hombres, conviven juntas al lado de la madre de una de ellas, casi octogenaria, que les hace la vida imposible. El argumento. suena a Las chicas de oro, y con razón. TVE estrena el próximo domingo Juntas pero no revueltas, la adaptación española de la famosa serie norteamericana, que, por estar dirigida a un público preferentemente femenino, ha sido elegida para competir con Lo que necesitas es amor, el imbatido programa de Jesús Puente en Antena 3.

Sofia, Rose, Blanch y Dorothy se han convertido en Benigna, Nuri, Julia, Rosa. Las elegidas para interpretarlas han sido cuatro actrices españolas de larga experiencia profesional: Amparo Baró, Mónica Randall, Mercedes Sampietro y Kity Manver.Juntas pero no revueltas no se apartará demasiado de la línea marcada por Las chicas de oro, pues su propósito fundamental sigue siendo el mismo: contar cómo es la convivencia de cuatro mujeres muy distintas que, por distintas razones, no tienen un hombre a su lado.

Para ello, los guiones de la versión realizada por TVE, realizados por Fermín Cabal, han procurado basarse en personajes con los que los espectadores españoles -especialmente las mujeres- puedan sentirse identificados. Así, Nuria (Mónica Randall) es una viuda catalana, cincuentona y de buen ver, que está acostumbrada al lujo y cambia continuamente de novio. Julia (Mercedes Sampietro), una profesora de literatura, desconfía de los hombres, pero en el fondo de su corazón sueña con el amor de su vida.

Rosa (Kity Mánver) es la graciosa del grupo: con su acento andaluz y su buen humor, es la que sale peor parada de todas las situaciones, y para colmo, no ha vuelto a salir con ningún hombre desde que murió su marido. Por último, Benigna (Ámparo Baró), la madre de Julia, ha sufrido una trombosis cerebral que le permite decir sin tapujos todo lo que piensa, siempre en contra de las demás.

El director de la serie, Antonio del Real, se mostró ayer confiado con el futuro de la serie, aunque reconoció que no acaba de comprender al público de televisión: "Creo que la serie es un producto de mucha calidad para las cosas que veo alrededor, aunque en televisión no siempre la calidad está en consonancia con la audiencia", declaró el realizador.