Los 'cascos azules' vuelven disparar contra los serbios

Dos cascos azules franceses resultaron heridos y dos camiones de ayuda humanitaria destruidos la noche del lunes al martes, por fuego de los serbobosnios en la ruta del monte Igman, único vínculo de Sarajevo con el mundo exterior. Los soldados de la Fuerza de Protección de las Naciones Unidas (Unprofor) volvieron, a replicar con fuego real al ataque de los serbios de Radovan Karadzic. Los cascos azules utilizaron granadas antitanque y morteros y bombas de humo para permitir al convoy, que transportaba 70 toneladas de alimentos, salir del atolladero. "Los serbobosnios dispararon contra la caravana varias granadas antitanque", declaró Gary Coward, portavoz de la ONU.Mientras el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Andrei Kózirev, volvía a advertir ayer contra el "extremo peligro" de que la ONU se convierta en "parte beligerante" en Bosnia con el despliegue de la Fuerza de Intervención Rápida (FIR), un primer contingente de soldados estadounidenses llegó ayer al puerto croata de Split. Las unidades norteamericanas contribuirán al desembarco de la sección británica de esta fuerza, unos 4.000 hombres, que arribarán en los próximos días. La contribución norteamericana se limita a un apoyo de carácter logístico en el que participarán 12 aviones de transporte.

Pero la tensión militar no se circunscribe al cinturón que rodea Sarajevo y las otras zonas seguras establecidas por la ONU, que siguen siendo hostigadas por las fuerzas de Karadzic. Observadores de Unprofor mostraron ayer su inquietud por los "inhabituales" movimientos de tropas croatas en las inmediaciones de la Krajina, territorio controlado por los serbios de Croacia.