Elkarri considera un error de ETA ponga condiciones para una tregua

PEDRO GOROSPE El movimiento Elkarri cuestionó ayer la validez del proceso que la banda terrorista ETA propuso el pasado miércoles para llegar a una tregua y una posterior negociación con el Estado español. Víctor Aierdi, portavoz de Elkarri, advirtió que "no se pueden poner condiciones previas al diálogo".

En el Parlamento vasco, al que acudió para explicar el resultado de una encuesta realizada como documento de trabajo de la reciente Conferencia por la Paz, Aierdi indicó que la principal reivindicación de la sociedad vasca en este momento es "la distensión y el diálogo". En su opinión, ese anhelo mayoritario se opone a la pretensión de ETA de condicionar un alto el fuego a que se ofrezcan garantías sobre el derecho a la autodeterminación.

Elkarri surgió de la extinta Coordinadora Antiautovía de Leizarán (San Sebastián-Pamplona) tras el acuerdo institucional que permitió su puesta en marcha tras la intervención de ETA en el conflicto. Con el objetivo de luchar por la paz, Elkarri nació del entorno de Herri Batasuna, y con el tiempo ha ido aglutinando a un colectivo que, aunque se mantiene fiel a los dictados ideológicos de la coalición, en ocasiones formula ciertas críticas a la estrategia de la Mesa Nacional.

Crítica sin descalificación

La ponencia oficial de HB, Oldartzen (Acometiendo), aprobada el pasado fin de semana y en la que se respalda la violencia etarra, criticó a Elkarri porque considera su estrategia "equivocada" pero, en vista de la creciente implantación del movimiento entre sus propias bases, declinó un ataque frontal. "Hay que ser críticos con Elkarri, pero sin descalificarle", se afirma en la ponencia.

"Mantenemos una actitud contraria", explicó Aierdi, "a complicar aún más un proceso de paz, de diálogo y de distensión, y por todo ello es una equivocación colocar las condiciones de manera previa". Este portavoz indicó que una vez inmersos en el proceso, podrían ir dándose esas condiciones, pero consideró que ese cambio en el orden de las cosas, reflejado en el comunicado de ETA, es negativo "porque parece que aleja la posibilidad de una apertura a corto plazo de un periodo de distensión".