Solidaridad con el contrabandista muerto

La Línea de la Concepción (Cádiz) vivió ayer una nueva jornada de enfrentamientos con la Guardia Civil por hechos relacionados con el contrabando. En esta ocasión el detonante fue más grave. En la noche del pasado lunes, un joven presunto contrabandista resultó muerto tras una violenta colisión entre la planeadora que pilotaba y una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil. El fallecido, Gustavo Adolfo García Yuste, de 25 años de edad, casado y padre de uña niña de 18 meses, intentaba introducir un alijo de tabaco rubio en la zona conocida por Canal de la Línea. Con él viajaba otro joven que resultó herido. A partir de ese momento la tensión fue subiendo de tono entre ciudadanos de La Línea y fuerzas del orden y ayer se produjeron graves incidentes callejeros.Los incidentes más graves se registraron en los barrios de La Colonia y La Atunara -en este segundo vivía el joven muerto-, en los que los antidisturbios actuaron sin miramientos. El momento de mayor virulencia se produjo pasadas las dos y media de la tarde en el paseo marítimo de la playa de Poniente, cuando dos planeadoras pretendían introducir nuevos cargamentos de tabaco. En ese momento, una lancha del Servicio de Aduanas, conocida por la turbo, inició una espectacular persecución por las aguas de la bahía. Desde la costa, varios agentes lanzaron botes de humo contra las embarcaciones y disparos al aire.

Mientras los guardias concentraban su atención en el mar, un grupo de vecinos lanzaron piedras de gran tamaño contra los vehículos de los agentes.

Las circunstancias que rodearon la muerte de Gustavo Adolfo García siguen siendo una incógnita. El gobernador civil de Cádiz, César Braña, emitió un comunicado oficial en el que afirma que la Guardia Civil "actuó como debía en el accidente de la planeadora". Según el gobernador, la planeadora apareció de improviso, sin ningún tipo de luces de navegación, a unos 30 metros de la proa de la patrullera, y chocó de inmediato con ésta, pese a que trataron de, evitar la colisión mediante una maniobra brusca.

Los amigos del fallecido, por el contrario, manifestaron ayer a este periódico que la versión del Gobierno Civil de Cádiz era "un cuento chino para engañar a la gente". Éste es su relato junto al lugar de los hechos: "La planeadora estaba en la misma playa, a punto de terminar la descarga. Habían bajado 18 cajas de tabaco y ya sólo (quedaban dos. Entonces apareció la patrullera y nuestros amigos trataron de huir. Por mala suerte, encallaron en la arena y se les averió el motor. Vino la patrullera a gran velocidad. No frenó y les metió la proa, justo por el centro de la lancha, donde estaban situados ellos".