Margarita Robles arremete contra Garzón por la situación de libertad de Amedo, mientras los fiscales piden explicaciones

La secretaria de Estado de Interior, Margarita Robles, criticó ayer con dureza al juez Baltasar Garzón por el tratamiento dado a los ex policías José Amedo y Michel Domínguez, que viven en libertad pese a estar aún clasificados en tercer grado penitenciario. Esta decisión la tomó la juez de Vigilancia Penitenciaria María del Prado Torrecilla, a solicitud de Garzón. Por su parte, los fiscales de Vigilancia Penitenciaria de Madrid han pedido explicaciones a Garzón por el mismo motivo, y han afirmado que ahora es cuando Amedo y Domínguez corren peligro, teniendo en cuenta su régimen de vida.Robles señaló en la Comisión de Justicia e Interior que "es muy difícil para un ciudadano de buena fe pensar que alguien condenado a 108 años de cárcel, que está todavía en el tercer grado, esté por la calle en la forma en que lo está". Refiriéndose a Amedo, señaló: "A veces él dice que está colaborando con la justicia, otras tomando copas y, desde luego yo no comparto el argumento de que está más seguro en la calle que en la cárcel".

La secretaria de Estado aseguró que no tiene constancia de que Garzón haya respondido a la queja de la policía sobre las dificultades que representa para sus escoltas proteger a Amedo por su constante deambular, y criticó también que el magistrado haya pedido mayores medidas de seguridad para Luis Roldán en la cárcel de Brieva (Segovia). Dijo que no habrá mayores medidas de seguridad y se preguntó: %Cómo se va a incrementar

[la seguridad] si ya no puede ni respirar con la cantidad de gente que tiene allí?", en referencia a los geos que le protegen constantemente.

A partir de ahí, Robles resaltó lo contradictorio de esta petición de Garzón para Roldán con la situación de Amedo y Domínguez: "No deja de sorprender a algunos que los señores Amedo y Domínguez estén cumpliendo un tercer grado muy sui géneris, en la calle y alegando que es por motivos de seguridad. A mí, como ciudadana", prosiguió Robles, "me resulta bastante difícil de comprender y mucho más cuando en otros casos, como el del señor Roldán, el propio juez Baltasar Garzón ha pedido que en el centro penitenciario se refuercen las medidas de seguridad".