Un juez vincula a diplomáticos iraníes con el atentado de Buenos Aires

Diplomáticos iraníes destacados en la Embajada de Buenos Aires son citados con diferente grado de sospecha en el informe que el juez federal Juan José Galeano se apresta a enviar a la Corte Suprema. Las presuntas vinculaciones de funcionarios iraníes se deducen de las actuaciones efectuadas tras al atentado perpetrado el 18 de julio pasado contra la mutua argentino-israelí de la capital federal, que se cobró un centenar de vidas.Fuentes judiciales aseguraron ayer que en el sumario se implica de alguna forma a iraníes de la legación diplomática, imputación que antes había efectuado en Caracas el arrepentido iraní Manouche Montaner. El Gobierno argentino, poco después de registrarse la voladura, no descartó la ruptura de relaciones con Irán de comprobarse la relación de Teherán con el atentado.

Mientras tanto, el juez Galeano debe decidir la situación personal de Juan Carlos Tellerdin, única persona de nacionalidad argentina que permanece detenida, como involucrado en la venta y reparación de una furgoneta que, cargada con cerca de 200 kilos de amonal, se utilizó en el ataque.

Fuentes próximas a la investigación citadas estos días por la prensa argentina se refirieron al agregado cultural, Moshe Rabbani, como el principal sospechoso. Este funcionario, que negó toda vinculación con el atentado, reconoció que en meses pasado había visitado varias agencias de venta de vehículos interesándose por una furgoneta, aunque precisó que la necesitaba para su uso personal.

El Gobierno argentino espera el resultado de las investigaciones de Galeano, quien envió a Venezuela, para su estudio por el arrepentido, fotografías de personas empleadas o relacionadas con la Embajada iraní en Buenos Aires.

En tanto se hace público el sumario, un centenar de judíos argentinos se manifestó ayer ante el Palacio de Tribunales exigiendo el esclarecimiento del atentado. La movilización, organizada por entidades juveniles judías, fue llamada "memoria activa" y los participantes portaban pancartas en las que se reclamaban acciones "contra la impunidad".