Eligio Hernández despachó ayer con Felipe González, aunque su cese se aplaza

El fiscal general del Estado, Eligio Hernández, despachó ayer en La Moncloa durante hora y media con Felipe González, en lo que se considera la antesala de su destitución, aunque fuentes de la Fiscalía del Estado aseguraron que su relevo no se producirá antes del Consejo de Ministros del próximo viernes e incluso podría posponerse hasta después de esa fecha, dado que quedan algunas semanas de margen antes de que el Tribunal Supremo examine la legalidad de su nombramiento.

La Sala de lo Contencioso del alto tribunal ha señalado para el 17 de junio la vista del recurso interpuesto por la Asociación de Fiscales, la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) y la Unión Judicial Independiente (UJI) contra el nombramiento de Eligio Hernández. La legalidad del nombramiento será examinada por el Pleno de la Sala Tercera, de lo Contencioso, integrado por 32 magistrados.

Aunque el cese de Hernández tiene carácter inminente, su sucesor "aún no esta decidido", según aseguraron fuentes gubernamentales. Estas fuentes descartaron como eventuales sucesores a los magistrados José Jiménez Villarejo y Luciano Varela.

Jiménez Villarejo, presidente de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo, sería incompatible para el cargo por razón de parentesco, dado que dos hermanos suyos son fiscales jefes en Barcelona y Cádiz, y el Estatuto del Ministerio Fiscal prohibe que en una misma demarcación ejerzan parientes de hasta segundo grado.

Responsables de Justicia aseguraron tener la certeza de que algunas de las asociaciones que han recurrido el nombramiento de Eligio Hernández impugnarían también el de Jiménez Villarejo por este motivo, con lo cual su candidatura quedaría hipotecada desde el inicio de su mandato. Respecto a Luciano Varela, magistrado progresista de Jueces para la Democracia y autor del proyecto de ley del Jurado, su nombramiento suscita demasiado rechazo entre los miembros de la carrera fiscal.