El precio del poder curativo

Desde 1970 la población de rinocerontes ha descendido en un 85% en el mundo. De las cinco especies que existen, los rinocerontes blancos eran los más numerosos hasta hace poco. De 65.000 ejemplares existentes en 1970 han pasado a menos de 2.000 actualmente.Cuatro rinocerontes blancos son matados por cazadores furtivos cada semana, por lo que algunos expertos creen que puede extinguirse en un año. Los demás, el rinoceronte negro africano y los asiáticos, que viven en la India, Sumatra y Java apenas suman la cifra de sus congéneres blancos y siguen cayendo.

En su comunicado final de la reunión en Ginebra, la Convención sobre el Tráfico Internacional de Especies Protegidas (CITES), pide establecer un diálogo con Rusia, Vietnam, Zambia y Laos y que otros países -Omán, los Emiratos Árabes Unidos y Yemen- permitan comisiones de investigación. Todos estos países están implicados en la desaparición del tigre o del rinoceronte, cuyo cuerno se utiliza también como empuñadura de dagas.

Para demostrar que, pese a sus declaraciones de buenas intenciones, los países implicados en la desaparición de estos animales siguen cometiendo abusos, la organización Tiger Trust llevó a la reunión de la CITES un vídeo realizado en secreto por sus ecodetectives. En las imágenes, grabadas en China hace sólo una semana, puede verse la producción en una fábrica estatal de medicinas a base de huesos de tigre. "No hemos recibido ninguna protesta por parte de las autoridades chinas. Saben de sobra que esto es verdad", dijo Michael Day, fundador de Tiger Trust.

Medicina tradicional

Según la medicina tradicional china, los huesos de tigre y los cuernos de rinocerontes tienen poderes curativos. Si en la próxima reunión de la CITES, en noviembre de este año, se recomiendan sanciones a los países que persisten en sus prácticas con estos animales, resulta difícil saber si las medidas, fundamentalmente el embargo de productos procedentes de esos países, van a resultar efectivas frente a la presión de centenares de millones de consumidores y al peso de la medicina china.

Lo que para muchos conservacionistas resulta doloroso es que este cada vez más veloz proceso de extinción de los rinocerontes y de los tigres está siendo estudiado y documentado sin que nadie tenga la solución.