"Espectáculo increíble"

A pocos metros de Las meninas, de Velázquez, una pareja de turistas franceses contemplaba ayer atónita, no la obra maestra del artista, sino el par de mantas rojas extendidas en el suelo, rodeadas por un cordón: una casera medida antigoteras instalada por los responsables del museo en la sala XII para que las gotas no salpicasen el cuadro que se encuentra a metro y medio de la fuga, (el retrato del Conde duque de Olivares), y para que los visitantes no resbalasen en el suelo. "¡C'est: un espectacle incroyable!" señalaban estos visitantes contemplando el goterón. Y un responsable de mantenimiento comentaba: "Ahora sólo faltaba que alguien se rompiera una pierna".Otro de los visitantes. resumió la situación con estas expresivas palabras: "Esto es un cachondeo". Las salas, que permanecieron cerradas casi todo el día del sábado, estaban ayer abiertas al público. La sala XIV, donde se encuentra Las hilanderas, tenía una pared completamente desnuda, en el lugar de Mercurio y Argos, que fue descolgado el sábado para evitar su deterioro. Un churretón de humedad reemplazaba la obra de Velázquez.