El vehículo inteligente

Conducir va a ser cada vez más fácil porque los coches serán capaces de reaccionar por sí mismos sin que medie intervención alguna del conductor. De esta forma, los conceptos de seguridad y comodidad irán cada vez más unidos. Esta idea la expuso Rafael Álvarez, secretario general de Seat, en su exposición sobre el- porvenir del automóvil: "El coche del futuro incorporará cada vez más automatismos, que harán más confortable y segura la conducción".La seguridad ha evolucionado notablemente en los últimos años. Algunos ejemplos: los diseños de estructuras que absorben la mayor parte del impacto en caso de choque son cada vez mejores, las barras de acero en las puertas refuerzan ese punto débil, los cinturones de seguridad son cada vez más perfectos. A esas mejoras cabe añadir la reciente aparición del airbag, esa bolsa de gas que se infla en microsegundos ante el volante para evitar que el conductor se dé contra él en caso de colisión frontal.

Unos sistemas que empiezan ya a fusionar seguridad y comodidad son los de frenos antibloqueo o ABS, que permiten despreocuparse del estado del terreno al pisar el pedal porque es el sistema de freno en sí mismo el que se adaptará a las condiciones del suelo de manera automática. Álvarez situó en esa línea los futuros limpiaparabrisas, que empezarán a funcionar cuando el coche note que llueve, o los faros que se encenderán por si mismos en cuanto la luz empiece a escasear, tanto al atardecer como al entrar en un túnel.

Como consecuencia de esas y otras innovaciones, "el conductor podrá relacionarse cada vez más con el entomo". Durante mucho tiempo, prosiguió, toda su atención debía estar puesta en la carretera, y su única relación con el exterior era pasiva: oír la radio. Ahora ya puede conversar por teléfono y pronto podrá enviar faxes o realizar tareas simples similares. "El automóvil" subrayó, "no será tan sólo un medio para transportar personas" .

La incorporación de ciertos niveles de inteligencia a las autopistas y autovías, que se prevé puedan permitir una conducción semiautomática de los automóviles convenientemente dotados, contribuirá también a configurar ese futuro de conductores relajados. Siempre que los conductores quieran relajarse.