El Gobierno francés inicia un estudio sobre los efectos de los videojuegos

El Gobierno francés ha iniciado una encuesta con objeto de analizar los riesgos reales provocados por el uso de consolas de videojuegos, según anunció ayer lunes la secretaria de Estado de Consumo, Veronlque Neiertz, tras haber sido declarados una docena de casos de epilepsia en Francia relacionada con estos juegos. Varios de los niños afectados padecían ya la enfermedad, pero otros no. La mayoría de ellos han tenido que ser hospitalizados algunos días para evitar complicaciones, aunque no se ha registrado ningún caso de fallecimiento. Se calcula que uno de cada cuatro hogares franceses está equipado con una consola.

La alerta sobre las videoconsolas provino del Reino Unido, donde una madre acusó a la firma japonesa Nintendo de haber "matado" a su hijo de 14 años, fallecido por convulsiones después de haber estado jugando durante una hora con el juego Super Mario. A raíz de este caso, se hicieron públicos otros de epilepsia en Inglaterra y al menos un centenar en Japón.

Las investigaciones en el Reino Unido sugieren que los casos recientes de epilepsia se registran en niños "fotosensibles", afectados por la frecuencia de las luces intermitentes emitidas por las consolas. Según la Asociación Británica de Epilepsia, el 1% de los niños no epilépticos son fotosensibles, tasa que sube al 5% entre los afectados de epilepsia.

En Francia los videojuegos ocupan el 40% del mercado del juguete. Mientras la empresa Sega mantenía ayer silencio, el otro fabricante, Nintendo, se esforzaba por dar explicaciones, asegurando que la compañía insertaba avisos sobre la utilización de sus juegos. Sin embargo, por el momento, no figura ninguna indicación en las cajas.

El presidente de la Comisión de Defensa de los Consumidores del Parlamento Europeo, el británico Kenneth Colllins (laborista), pidió ayer a la Comisión Europea iniciar con carácter de urgencia una investigación sobre los efectos de los videojuegos.