El mapa de la nueva Bosnia lleva las conversaciones de paz al borde del fracaso

La Navidad ortodoxa salvó ayer del fracaso a las negociaciones de Ginebra para conseguir la paz en Bosnia. La suspensión de las discusiones hasta al próximo domingo ha impedido que se produjese la ruptura entre las dos posiciones antagónicas y aparentemente irrenunciables mantenidas por musulmanes y serbios: Estado soberano e independiente, exigido por el presidente Alia Izetbegovic, y partición de Bosnia y autodeterminación de los serbios, reclamadas por el, líder serbio Radovan Karadzic.La jornada matutina produjo un espejismo de éxito cuando las partes enfrentadas acordaron un alto el fuego sobre el terreno, que luego se mantuvo mientras toda Bosnia tenía sus ojos vueltos a Ginebra. Pero el alto el fuego estaba condicionado a un acuerdo general más amplio, acuerdo que ayer parecía imposible de alcanzar. La propuesta de partición de Bosnia en 10 provincias con amplia autonomía realizada por los copresidentes de la conferencia, Cyrus Vance y David Owen, no satisface ni a Izetbegovic ni a Karadzic. El presidente exige un Estado soberano y unitario, que Karadzic descarta de plano. Para él no puede haber otra partición que una en tres áreas étnicamente puras. Página 3