Las palabras y las piedras

Que las palabras son piedras, es verdad y mentira a la vez. Es verdad porque no hay duda alguna de que las palabras pueden comunicar opresión y violencia produciendo daños tan crueles como los causados por las armas. Pero las palabras son bastante distintas de las piedras, exigen diferentes criterios de juicio y otras formas de defensa. (...)Genial es la frase del músico y pintor judío Herbert Pagani: "Israel es único lugar en el mundo en el que cerdo judío significa un judío que no se lava". (...) En este momento habría que utilizar el lenguaje con suma precaución. Pero no ocurre así en muchos casos. Hace tiempo, Forlani afirmó ser partidario de la reinstauración de la pena de muerte. (...) Lo sorprendente de esta declaración es que procedía del líder de un partido de inspiración cristiana. Asimismo, el cabeza rapada que lanza eslóganes nazis es menos culpable que el liguista Gianfranco Miglio cuando afirma que los de Hitler fueron «errores de estilo". (...)

Hoy, el modelo Miglio es el más difundido: es un modelo semántico e ideológico fundado sobre la "banalización del mal" basada en una concepción amoral de la historia, en la que todas las ideologías, las culturas, los acontecimientos humanos se colocan en el mismo plano, fuera de cualquier juicio de valor, criterios de análisis y balance histórico. (...) Son mensajes enmarcados en una general vulgarización del lenguaje público.

13 de diciembre