Fracasa un intento de pago de parte del rescate por la farmacéutica de Olot

La familia de la farmacéutica de Olot (Gerona) Maria Ángels Feliu, secuestrada el pasado viernes por la noche, intentó pagar, posiblemente anteanoche, una parte del rescate solicitado por los raptores. Fuentes próximas a la investigación han señalado que la cantidad depositada por miembros de la familia en un lugar no determinado no fue recogida por los secuestradores.

Según estas fuentes, las personas que tienen en su poder a Maria Angels Feliu, hija del propietario de una importante empresa suministradora de fluido eléctrico -Hijos de J. Bassols-, exigieron a la familia la entrega de una paga y señal del rescate.Cuatro días después del secuestro, la investigación de la Guardia Civil continúa desarrollándose en el más estricto silencio. El hermetismo es también total en el Ayuntamiento, que se ha erigido en portavoz de la familia, y entre los vecinos y familiares de Maria Ángels Feliu, tras el comunicado del juez que instruye el caso, Santiago Pinsach, en el que advierte a los medios de comunicación que emprenderá acciones contra cualquiera que vulnere el secreto del sumario.

A medida que pasan los días va tomando cuerpo la hipótesis de que se trata de un grupo organizado de delincuentes, según fuentes municipales. La elección de la farmacéutica, de 34 años, madre de tres hijos de corta edad -entre los seis y los dos años- y miembro de una familia adinerada pero que al mismo tiempo no hace ostentación alguna de su riqueza, orienta las sospechas sobre la identidad de los secuestradores hacia personas conocedoras de la sociedad olotense e incluso próximas a la familia. Estas características se darían como mínimo en uno de los secuestradores.

Maria Ángels Feliu fue secuestrada pasadas las nueve de la noche por tres individuos en el garaje de su propia casa. Los captores han comunicado con la familia al menos en dos ocasiones: la primera para anunciar que se trataba de un secuestro y la segunda para concretar los términos del rescate.