Portugal, Irlanda y Grecia se defienden del fuerte acoso a sus monedas

Portugal, Irlanda y Grecia compartieron ayer las presiones del mercado de divisas contra sus monedas. Los dos primeros, que son miembros del SME, anunciaron que defenderán sus monedas contra la devaluación ya sea, según el ministro irlandés, con intervenciones o, como las autoridades portuguesas, con subidas de los tipos de interés.

La dracma griega, aunque no forma parte del SME, también soporta las presiones a la baja toda vez que el Gobierno de ese país pretende ligar la cotización de su moneda al marco alemán, ahora en clara fortaleza.

El primer ministro irlandés aseguró que "bajo ninguna circunstancia" piensa devaluar la libra irlandesa y que tampoco tiene previsto elevar los tipos de interés. Pero el banco central irlandés, en coordinación con el alemán Bundesbank, tuvo que sujetar ayer su moneda cuando alcanzó el mínimo en el SME.

El Banco de Portugal, mientras, difundió un comunicado en el que defiende tanto la permanencia en el SME como la estabilidad del tipo de cambio. En él se dice que las devaluaciones de la lira y la peseta demuestran que Portugal ha, optado inequívocamente por la estabilidad. El escudo se depreció ayer hasta 89,2 escudos por marco, pero no alcanzó el límite mínimo de la banda del SME, que es de 92,3 escudos.