Equiparados los estudios militares y los universitarios para lograr empleos públicos

Los oficiales que hayan completado estudios de grado superior en academias militares, de cinco años, podrán matricularse en el tercer ciclo de cualquier carrera universitaria y participar en oposiciones en las que se exija el título de licenciado, arquitecto o ingeniero.

Quienes superen los tres primeros cursos de la enseñanza militar podrán optar a puestos de trabajo en las administraciones públicas para los que se requiera el título de diplomado universitario. Esta disposición que se aplicará con carácter retroactivo a los actuales oficiales, es la principal novedad del decreto sobre directrices generales de los planes de estudio para la enseñanza militar superior y media, aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros.El secretario de Estado para la Administración Militar, Gustavo Suárez Pertierra, afirmó ayer, durante la presentación pública del decreto, que el Ministerio de Defensa se propone desarrollar la reforma de la enseñanza militar, a la que esta norma da comienzo, con "pies de plomo".

El decreto pretende integrar la enseñanza castrense en el sistema educativo general, para lo que arbitra mecanismos de equivalencia entre titulaciones y convalidación de asignaturas. Suárez Pertierra definió los estudios militares como "una carrera técnica, con componentes humanísticos", destinados a formar a conductores de hombres".

Los planes de estudios militares incorporarán criterios propios de la enseñanza universitaria, como los de crédito o carga lectiva. Las asignaturas se agruparán en áreas de conocimiento, fijadas por el Consejo de Universidades, y podrán ser obligatorias, optativas, comunes y específicas. Defensa se propone aprobar en breve los planes de estudio de la enseñanza superior, de forma que puedan aplicarse el próximo curso.