Alergia a la occidental

El hombre contemporáneo parece haberse vuelto alérgico a los frutos del progreso. "De forma global, se puede decir que las enfermedades alérgicas han aumentado en los países industrializados", confirma María Rubio, presidenta de la Sociedad Española de Alergología.Algunas de sus manifestaciones están relacionadas con el uso incontrolado de los medicamentos, el empleo de sustancias nuevas en las industrias y los efectos directos de la contaminación ambiental en el incremento del asma y las rinitis.

¿Cómo explicar que este tipo de patologías no esté afectando al llamado Tercer Mundo? "Una de las teorías es que sean el precio de la civilización. Es como si los anticuerpos de las enfermedades alérgicas, que deberían estar vigilantes frente a infecciones parasitarias, una vez liberados de ellas, se hubieran vuelto locos hacia sustancias que en principio no son agresivas", sugiere María Rubio.

"Un fenómeno que llama la atención es la alergia a los epitelios de animales. Pero es que, claro, antes no se convivía con los animales en espacios tan reducidos como los hogares de hoy, y antes, ¡nadie tenía un hámster en casa!", concluye.