La eliminación del índice de libertades políticas suaviza los resultados

Todas las personas consultadas coinciden en señalar que la ONU ha suavizado el informe de este año, al haber eliminado el índice de libertad política que clasificaba 160 países en un listado que levantó fuertes polvaredas internacionales el año pasado. España fue clasificada en el grupo de países con nivel medio de libertad humana. Diversas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales de todo el mundo criticaron entonces que se había tomado la mentalidad occidental como la única válida para valorar los niveles de libertad individual y social.

El propio Jean Fabre, jefe de información del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para Europa, reconoce: "En el índice de libertad política no había una base científica buena. Eran datos de 1985 referidos a 40 libertades definidas según convenciones internacionales y sólo procedentes de 88 países, en vez de los 160. Empleamos, además, una metodología completamente errónea, que medía cada libertad como todo o nada. En cualquier caso, quisimos alertar sobre la relación desarrollo / libertades públicas". "Este año", continúa Fabre, "hemos omitido ese índice y hemos comenzado un trabajo riguroso, en colaboración con el Centro de Derechos Humanos de la ONU, para establecer qué pautas son las más adecuadas, sin que haya influencias de las intenciones particulares de ningún país. Hasta que no acabemos este trabajo, no volveremos a publicar ninguna clasificación de libertades políticas".

Maestros y militares

En el informe de 1992, el PNUD se ha limitado a introducir las libertades dentro de uno de los capítulos de análisis parciales que acompañan a la clasificación general. Señala que la principal vulneración en el mundo se refiere al derecho a no ser detenido sin una acusación legal y no ser sometido a torturas, asesinatos o desapariciones. El informe concluye que los países con niveles elevados de desarrollo humano tienen una libertad política media del 84%, en tanto que los situados en los últimos puestos padecen un índice medio del 48%.

El documento recoge una duda: "Muchas personas argumentan que si bien la libertad debe someterse a debate no se debe medir. La libertad es demasiado valiosa para ser reducida a una cifra". Sin embargo, el PNUD no se resiste a aportar algunos datos que considera relevantes del estado actual del mundo: una de cada 500 personas que viven en países industrializados se encuentra en la cárcel; Estados Unidos registra la mayor cantidad de presos -426 por cada 100.000 habitantes-, en comparación con los 268 de la antigua URSS y los 45 que hay en Japón.

Los redactores destacan especialmente un hecho: por cada 100 maestros hay en el mundo 97 militares.