Por una nueva cultura penal

El secretario general del CDS, Antoni Fernández Teixidó, cree que el Código Penal debe instaurar una "nueva cultura penal". Para su partido, la tipificación de los delitos ecológicos debe superar el principio del "acto contaminante" (quien contamina paga), para implicar a todas las administraciones en la obligación de prevenir el medio ambiente como responsabilidad de su gestión. Respecto a los delitos urbanísticos, dice: "Desearíamos una singular consideración sobre el patrimonio concebido ampliamente como herencia a proteger y preservar". Ello abarca desde el legado cultural e histórico hasta el paisajístico.Respecto al apartado que contempla los delitos de torturas, el CDS entiende que cualquier consideración penal ha de contemplarse como una fragante violación de los derechos humanos.

En su opinión, la discusión de los delitos informáticos debe alertar contra "qué y quiénes estamos legislando y qué estamos defendiendo". Por su parte, los delitos de empresa deben cifrarse en el deseable control y claridad de los intereses en juego, desde los accionistas hasta los derechos laborales que amparen la igualdad de oportunidades.

Finalmente, ante el terrorismo y el narcotráfico "es básico utilizar medidas que intervengan estas realidades desde la solidez constitucional, aislando toda confusión", y, sobre la despenalización del aborto afirma: "No caben restricciones cuando el embarazo sea consecuencia de delito contra la libertad sexual".