Alemania prepara nuevas leyes de asilo

Las cúpulas de los partidos gubernamentales cristiano-demócrata y liberal (CDU-CSU y FDP) y de la oposición social demócrata (SPD) buscaban ayer mecanismos para modificar las leyes de asilo en Alemania.El Bundestag (Parlamento) aplazó la discusión sobre el tema hasta después de la reunión que mantendrá hoy el canciller Helmut Kohl con los líderes de estos partidos.La violencia xenófoba de las últimas semanas remitió relativamente, aunque la noche del martes al miércoles aún se produjeron varios ataques contra extranjeros. Las amenazas del Gobierno de Bonn de aplicar todo el rigor de la ley, incluida la cadena perpetua, a los incendiarios, ha supuesto un repentino descenso del número de ataques contra los peticionarios de asilo en Alemania.

Además, la captura de los tres neonazis que prendieron fuego al hostal para extranjeros de Hünxe, cerca de Düsseldorf, causando gravísimas quemaduras a dos niñas libanesas, y el relato de cómo lo concibieron, ha servido también para que la sociedad alemana supiera cómo se crían los monstruos en su seno. Volker Leuke y André Cieceor, los dos de 18 años y mecánicos de automóviles, así como Jens Gehling, de 19 años, aprendiz de albañil y autor material del atentado, decidieron incendiar el albergue tras una noche de fiesta. La madre de Leuke aprueba lo hecho por su hijo.

Democristianos y socialcristianos bávaros parecen, de momento, dispuestos a renunciar a su obsesión por conseguir una modificación del artículo 16 de la Ley Fundamental alemana que regula, muy liberalmente, el derecho de asilo. La negativa a apoyarles de la oposición socialdemócrata y también de sus socios liberales en el Gobierno ha conseguido que la CDU y la CDU acepten, temporalmente, buscar mecanismos que aceleren los trámites, que en la actualidad pueden durar hasta tres anos, y reduzcan la espera, y consiguientemente la estancia de estos extranjeros en Alemania a un máximo de seis semanas.

Pero la discusión sobre el tema de las leyes de asilo esconde el auténtico problema, el de la inmigración en su totalidad. Los peticionarios de asilo político, según indica el Gobierno, ascenderán este año a 200.000, de los que menos de un 5% lo obtendrá. Se trata tan solo de una pequeña parte del total de inmigrantes. En Alemania la nacionalidad se concede exclusivamente en virtud del ius sanguinis. Esto supone que existen en el país millones de extranjeros, especialmente turcos, que son alemanes a todos los efectos, menos legalmente. Han nacido y vivido toda su vida en el país, pero seguirán siendo siempre extranjeros.

Este principio, por otra parte, permite la entrada de cualquiera que pueda probar un origen alemán. Este año más de 200.000 alemanes soviéticos, húngaros, rumanos, polacos o descendientes de quienes quedaron en los territorios perdidos tras el fin de la II Guerra Mundial, llegarán a Alemania con su pasaporte de la RFA. Además queda el gran número de emigrantes ilegales de Latinoamérica, Filipinas y otros lugares.