Regreso a Berlín

La decisión de hacer a Berlín la capital de una Alemania nuevamente unida tendrá profundos efectos a largo plazo en la geografía política y económica de Europa. ( ... ) Serán necesarios muchos años para que se complete el movimiento físico desde Bonn, pero la realización de los efectos potenciales en las inversiones y desarrollos económicos será inmediata. No se trata de la mudanza de unos departamentos ministeriales de una parte de Alemania a otra. Ligado a la reapertura de la parte oriental del continente, es un cambio fundamental. (...)Habrá ganadores y perdedores. Los principales beneficiados serán los habitantes de Berlín y de Europa central y oriental, que han visto un voto de confianza en su futuro. (...) El reto es importante, especialmente a la vista de las necesidades financieras a corto y medio plazo; pero sería una equivocación dar por sentado que el país no lo podrá afrontar. Entre los perdedores están los habitantes de Bonn. (...) El traslado hacia el centro de Europa podría ser seguido por un cambio en las intenciones inversoras hacia las nuevas fronteras no sólo por parte de los europeos, sino también por los japoneses y los norteamericanos. Una vez más, el mensaje es que los británicos deben tratar con fuerza de competir internacionalmente. Nada de ello, sin embargo, debe mitigar el placer de ver una Europa abierta pacíficamente en una dirección que parecía casi inconcebible.

, 24 de junio