El acusado se declara inocente en el juicio con jurado en Cataluña

Josep Ribot, de 29 años, acusado de haber asesinado y descuartizado a su compañera, Esperanza Comas, manifestó ayer al juez que su confesión ante el detective Jorge Luis Colomar es "una novela" que se inventó porque "estaba bajo presiones psicológicas muy fuertes y el detective me hizo beber". La sesión del juicio, iniciado ayer en Gerona, despertó gran expectación por tratarse del primer caso en el que se utiliza un jurado popular puro en Cataluña, formado por 10 personas voluntarias. La decisión del jurado no vincula al juez.En la vista oral que se celebra en la Audiencia de Gerona, el acusado se negó a responder a las preguntas del ministerio fiscal, que solicita 29 años de prisión por asesinato, porque, según su abogado, todos le "consideran culpable".

Durante la intervención del fiscal, Carles Ganzermüller, que se prolongó hasta media tarde, Ribot permaneció en el banquillo callado y con expresión impávida, que mantuvo durante la lectura de sus declaraciones ante la policía y ante el juez.

En la primera declaración, Ribot reconoció haber matado el 4 de febrero de 1990 a Esperanzas Comas, de 29 años, con la que convivía desde hacía dos.

Ribot relató a la policía el presunto asesinato, descuartizamiento e incineración del cadáver tras confesarse culpable ante el detective privado Jorge Luis Colomar en el transcurso de una cena. Ante el juez, lo negó todo.