Salman Rushdie se extraña de la falta de reacción del Gobiemo británico

Salman Rushdie, el autor británico nacido en India que vive escondido por una amenaza de muerte, criticó ayer al gobierno del Reino Unido por no responder a la ratificación de su sentencia pronunciada por las autoridades iraníes. Rushdie se esconde desde que hace 22 meses el ayatolá Jomeini pronunciara contra él una pena de muerte a causa de supuestas blasfemias contenidas en su libro Los versos satánicos.

"Estoy muy agradecido al gobierno británico por haberme ofrecido esta protección y continuar haciéndolo", dijo Rushdie desde su actual escondite, en una entrevista por televisión. "Pero estoy empezando a sentirme algo perturbado por la falta de reacción del gobierno británico a las reiteradas amenazas de afuera".

Rushdie recordó que el gobierno de Margareth Thatcher había adoptado medidas severas cuando fue pronunciada la sentencia de muerte "y no veo razones para no hacerlo ahora", dijo. Según Rushdie, no había esperado que su arrepentimiento motivase una conmutación inmediata de la pena de muerte, pero sí que desericadenase un proceso hacia ello.

El miércoles pasado, después de que Rushdie abrazara la fe islámica, la máxima autoridad religiosa de Irán, el imam Alí Jamenei, dijo que la sentencia pronunciada contra Rushdie tiene carácter irreversible.