Nuevas manifestaciones y huelgas en Rumania contra Iliescu

Nuevas manifestaciones contra el jefe del Estado, Ion Iliescu, y la extensión de las huelgas en protesta por la falta de suministros industriales marcaron durante el fin de semana lo que ya se perfila como una nueva ofensiva contra el presidente y el Frente de Salvación Nacional (FSN). En Bucarest y Brasov, miles de personas exigieron la dimisión del presidente y el desmantelamiento, del aparato comunista que, según considera la oposición, pervive tras las siglas del FSN.Las revelaciones del ex asesor presidencial Silviu Brucan y del ex ministro de Defensa Nicolae Militaru sobre la conspiración contra Nicolae Ceausescu que, desde hace más de una década, habían organizado generales del Ejército, mandos de la policía política (Securitate) y dirigentes comunistas desplazados, como Iliescu y Brucan, ha restado aún más credibilidad al presidente.

Brucan ha anunciado nuevas revelaciones sobre el golpe de Estado que derrocó al dictador en diciembre. Brucan y Militaru son los primeros altos mandos del régimen pos-Ceausescu que reconocen la existencia de un golpe, negado por Iliescu. Las declaraciones de ambos y el hecho de que fueran publicadas por el diario de mayor difusión en Rumania, hasta ahora fiel portavoz de Iliescu, sugieren, la apertura de un nuevo frente contra la actual dirección del frente.

Por otra parte, en Brasov, 11.000 obreros de una fábrica de tractores se declararon ayer en huelga por la falta de piezas para la producción.

Los huelguistas no reanudarán el trabajo hasta que acuda a la fábrica el jefe del Gobierno, Petre Roman, y garantice, los suministros. La pasada semana ya se produjeron numerosos paros en factorías de Brasov, la segunda ciudad industrial de Rumania.