Menem restituirá los derechos políticos de los militares condenados en Argentina

El presidente argentino, Carlos Menem, un consumado deportista, aficionado a la práctica del boxeo, golpeó el pasado fin de semana con uno de sus típicos directos de derecha: anunció que los ex miembros de las juntas militares de la dictadura y el líder guerrillero peronista Mario Firmenich, todos ellos condenados en juicio por graves violaciones a los derechos humanos, podrán participar legalmente en política cuando les sea concedido el indulto.

Menem consideró que los Montoneros, unos 200 miemtiros de la disuelta organización guerrillera que acaban de constituirse en corriente interria del peronismo y aspiran a ocupar puestos en el Gobierno, "tienen todos los derechos y obligaciones que cualquier ciudadano".Y para que no quedaran dudas de que ese derecho alcanza incluso a los futuros indultados, agregó: "Y lo mismo sucederá cuando, en el curso de este año, salgan de la cárcel los detenidos que incursionaron en el terreno de la subversión, ya que quedarán habilitados para ejercer la política".

El periódico de izquierda Página 12 resumió en su prImera plana de la edición dominical las declaraciones que Menem hizo a la Prensa en la provincia de Chaco, al norte del pais, con un época en el que el general Jorge Videla, el almirante Emilio Massera y el brigadier Orlando Agosti ejercían la brutal dictadura durante la que desaparecieron unas 30.000 personas, y el siguiente titular: "Aquí no ha pasado nada". La táctica de Menem de anunciar y confirmar cada dos o tres días el indulto -al que también llamó "amnistía" el mismo domingo- pretende demoler lentamente las reacciones que su decisión naturalmente va a provocar entre las organizaciones defensoras de los derechos humanos y en la oposición política. El presidente y sus ministros insisten en que se trata de una atribución constitucional indiscutible y transmiten a la sociedad la sensación de que nada puede hacer contra ella.

El diputado socialista Simón Lázara, aliado al radicalismo, ha pedido el Juicio político del presidente por los indultos que firmó en octubre pasado, cuando benefició a los militares y civiles que aún estaban bajo proceso. Algunos diputados del sector más crítico del bloque peronista advirtieron que la libertad de Videla, Massera, Viola y Firmenich, además de otros condenados, provocaría la definitiva ruptura del partido. Menem, que ratifica diariamente su alianza con la derecha social y económica, ha prometido a los jefes de las Fuerzas Armadas la libertad de los comandantes antes de fin de año. Y está dispuesto a cumplirlo.