Una operación de más alcance

La operación para garantizar al PSOE una estabilidad en el gobierno municipal hasta 1991 también abarcó, según parece, a otros dos concejales centristas: Fernando Bocanegra y Carlos Martínez Serrano. Ayer Javier Soto, en la cadena Ser, aseguraba haber informado a Martínez Serrano de sus negociaciones con el PSOE, aunque, según dijo, su compañero de partido se mostró siempre contrario a la operación. Martínez Serrano negó haber mantenido negociaciones con el PSOE.Bocanegra, sin embargo, admitió haber recibido ofertas. "Saturnino Zapata me llegó a proponer el lunes la Concejalía de Seguridad, después de decirme que su actual responsable, García Horcajo, se iba del Ayuntamiento. El martes le di mi negativa", dijo Bocanegra. Zapata, se limitó a decir: "Hoy por hoy no quiero valorar estas declaraciones".

Agustín Rodríguez Sahagún tuvo conocimiento hace mes y medio de las conversaciones que ya entonces mantenía Soto con el PSOE. En las 48 horas anteriores a que el paso de Soto y Martínez Parrondo se hiciera público, Rodríguez Sahagún empezó a sospechar al no lograr establecer contacto con el que hasta entonces era su mano derecha en el Ayuntamiento. "Doy por cerrada la crisis de mi grupo", dijo ayer Rodríguez Sahagún. "La actitud agresiva que ha demostrado Barranco es la confirmación de una estrategia basada en legitimar cualquier tipo de comportamiento para permanecer en el poder".

Más agresivo estuvo José Ramón Caso, secretario general del CDS, quien en Antena 3 calificó lo ocurrido como .un robo político" y aseguró que Soto jamás manifestó reticencias o se mostró disconforme con la política centrista. Luis Eduardo Cortés, presidente regional del PP, calificó el trasvase de concejales de "fraude electoral'.

Juan Barranco, tras hablar unos minutos con Francisco Herrera, de IU, aseguró que confía en alcanzar un acuerdo con este grupo en temas importantes en la reunión que ambos mantendrán la próxima semana.