Villar tiene varios candidatos para suplir al secretario de la federación

Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol, ha manifestado que tiene en mente varias personas para sustituir a Agustín Domínguez, secretario general al que destituyó anteayer, y aunque no dio nombres, sí se reafirmó en la teoría de que será un empleado "con contrato temporal", ligado a la permanencia del propio presidente.Al referirse a la destitución de Domínguez, que llevaba 10 años en el cargo, dijo que ha sido "el primer sorprendido de que se filtrara a los medios de comunicación anteayer, puesto que había pactado con Domínguez no hacerla pública hasta dentro de dos días, "a fin de que tuviera tiempo para consultar con sus asesores legales respecto de la indemnización que ha de percibir". Según Villar, "abandona totalmente sus funciones y en cuanto al dinero que le pueda corresponder se remite a la legislación vigente.

Domínguez pasó precisamente la jornada de ayer en su despacho de la Federación, recogiendo sus cosas y estudiando con sus abogados la indemnización que legal y laboralmente le puede corresponder, así como el posible derecho a otras cantidades supletorias por haber ocupado un alto cargo.

Sobre la filtración de la noticia, Villar dice que la misma la conocían él mismo, Domínguez y Juan Padrón, vicepresidente primero de la Federación, y muy poquitas personas más. "Yo no la he filtrado, y estoy seguro de que Domínguez, tampoco", afirmó.

La decisión de destituirle ha dicho Villar que ha sido exclusivamente suya, porque es facultad del presidente, aunque también ha reconocido que había hablado de este asunto con otros miembros de la junta directiva.

Sobre Domínguez, ha dicho que era "un profesional muy bueno y trabajador", y que ha sido una decisión muy desagradable para él, pero creía que debía tomarla. Pese a que Villar no quiso manifestar las causas concretas de la destitución, afirmó que de Domínguez, que "es persona que no está bien vista en el fútbol español", y aseguro que el 80% de las personas que le apoyaron en las elecciones a la presidencia, que ganó hace cinco meses, estaban en contra de Domínguez.

Mutismo

Se negó a realizar cualquier tipo de declaración sobre su destitución. No deseó siquiera aclarar la situación en que quedan sus cargos en la FIFA y UEFA, en los que desempeña las funciones de miembro de las comisiones organizadora del Mundial-90 y de las copas de Europa de clubes, respectivamente. Hace unos meses puso verbalmente estos cargos a disposición del presidente de la Federación, pero el nombramiento para dichos cargos corresponde directamente a la FIFA y a la UEFA.Fuentes allegadas al propio Domínguez han asegurado, por otra parte, que el ya destituido secretario general de la Federación no tiene la intención de ocupar cargo alguno en el fútbol a nivel internacional porque no quiere cambiar de residencia, y tampoco en club alguno nacional.