Una profesora subía la nota a alumnas que le informaban sobre su menstruación

La Sala de lo Contencioso-administrativo de la Audiencia de Bilbao considera "falta grave" el procedimiento seguido por una profesora de la facultad de Filosofía y Letras de San Sebastián que proporcionaba tres puntos más a las alumnas de cuarto curso de la asignatura de psicofisiología. Las alumnas proporcionaban información sobre el ciclo menstrual para ser utilizada en la tesis doctoral de la profesora, según informa Vasco Press.En mayo de 1985, según recoge la sentencia, se recibió en la facultad de Filosofía y Letras una serie de escritos firmados por varios alumnos que denunciaban la actividad docente de la profesora A. L. C., "por ofrecer tres puntos más en la nota final de la asignatura de cuarto curso de psicofisiología a las colaboradoras femeninas, alumnas del centro, que faciliten o proporcionen información experimental sobre el ciclo menstrual", hecho considerado por los alumnos como "discriminatorio al no medir conocimientos'.

En la nota se señala que la profesora venía firmando contratos de contingencia con alumnas colaboradoras en los que se establecía la subida de tres puntos en la nota total.

Tras recibir esta denuncia, el decanato solicitó al rectorado el nombramiento de un juez instructor para que investigara, los hechos denunciados, así como el nombramiento de un tribunal para realizar los exámenes y calificaciones de la asignatura impartida por A. L. C.

El rectorado de la universidad del País Vasco suspendió de funciones a la citada profesora durante el curso 1985-1986 e improrrogabilidad del contrato que mantenía con la universidad.

La sentencia considera como discriminatoria la actuación de la profesora, por lo que le impone una suspensión de funciones durante tres meses. La Sala de lo Contencioso-administrativo y el Tribunal Supremo habían desestimado un recurso de la profesora que invocaba una vulneración de la Constitución, que reconoce el derecho de cátedra y por supuesta indefensión. La sentencia considera "antiética y constitutiva de soborno y desprestigio para la facultad" la actuación de la profesora.