Izquierda Unida recurrirá la venta de terrenos en Huelva a personas del entorno de González

Los representantes de Izquierda Unida-Convocatoria por Andalucía (IU-CA) en el Ayuntamiento de Almonte (Huelva) han iniciado los trámites para la interposición de un recurso contencioso-administrativo contra el acuerdo de esta corporación municipal para vender unos terrenos costeros a Club Atlántico, sociedad de la que son o han sido accionistas varios amigos y algún familiar del presidente del Gobierno, Felipe González, según afirmó ayer en una conferencia de prensa Luis Carlos Rejón, portavoz de IU-CA en el Parlamento de Andalucía.Tanto Rejón como Felipe Alcaraz, secretario general del Partido Comunista de Andalucía, declararon que no acusan de ningún delito a Felipe González, porque no está tipificado como tal en el Código Penal el tráfico de influencias, pero se muestran sorprendidos "de que los beneficiarios de esta venta sean personas que poseen una información privilegiada y son próximas a Felipe González. González tiene derecho a celebrar reuniones donde quiera, pero nosotros", agregó Felipe Alcaraz, "también lo tenemos para relacionar datos, y consideramos que la presencia de Miterrand y Cavaco Silva en Doñana supone una promoción internacional de los terrenos situados próximos a esta zona".

Ambos comentaron asimismo que si es cierto que algunas de las personas próximas al presidente del Gobierno han vendido su participación en Club Atlántico, cinco días antes de que IU formulase sus preguntas en el Parlamento andaluz sobre este presunto caso de tráfico de influencias, "han invertido demasiado tiempo en darse cuenta de las razones éticas que aconsejaban abandonar el negocio".

Rejón precisó, en relación con la versión del alcalde de Almonte, publicada ayer en este diario, que los concejales de IU-CA votaron el 5 de mayo de 1987, al igual que todos los demás grupos de la corporación, a favor de emprender gestiones para la venta de unas determinadas parcelas urbanizables, pero que el pasado 22 de enero votaron en contra de su adjudicación concreta a la sociedad Club Atlántico.

Rejón defendió la conveniencia de la recalificación que se hizo del terreno ahora adjudicado para que la construcción en él no quedase restringida a viviendas unifamiliares y facilitar la instalación de hoteles. "Pero cuando el alcalde propuso el 5 de mayo de 1987 iniciar gestiones para la venta de las parcelas no reveló la existencia de un acuerdo firmado el día 20 de febrero por el anterior alcalde con Club Atlántico, y que quedó materializado en un talón de diez millones de pesetas como anticipo de la compra y en un documento que obra en poder de IU".

Izquierda Unida-Convocatoria por Andalucía se opuso al acuerdo de venta, el 22 de enero, al rechazar la mayoría municipal las exigencias de esta coalición para realizar un estudio jurídico y técnico, porque consideraba una ganga vender 100.000 metros cuadrados por 70 millones de pesetas.