No hay compradores de renta variable

La inversión en renta variable ha confirmando el mal momento que atraviesa y no ha encontrado resistencia alguna en el nivel de apertura anual, rompiéndolo con facilidad a pesar de que algunos de los valores que más ponderan en el índice general han jugado en contra de la tendencia dominante. El empuje vendedor en los sectores industriales ha arrastrado al índice del mercado madrileño hasta el nivel del 207,5%, agrandando aun más las diferencias entre sectores con relación a las posiciones de primeros de año. Esta baja, propiciada por una presencia mayoritaria de papel en los corros tiene, no obstante, como factor fundamental la pasividad de los compradores, lo que perfila un panorama complicado a medio plazo para las bolsas.Los valores eléctricos han pagado las consecuencias de una crisis de confianza en la que no han tomado parte, pues sus cotizaciones nunca disfrutaron de unas alzas tan importantes como para recibir ahora el recorte correspondiente. Las caídas de los precios de las principales sociedades han quedado, sin embargo, suavizadas por el avance de Endesa. También Telefónica, con una recuperación de la caída inicial, aportó su grano de arena al intento de mantener el índice del lado de las ganancias. En el sector bancario fueron, Central y Santander los que aportaron algo positivo frente a las bajas del resto, lo que no impidió que el índice del grupo registrase una baja de más de tres puntos. La ausencia de dinero se ha notado con más fuerza entre los valores industriales, con bajas que en varias ocasiones han superado el 10%, pese a las exigencias de un número determinado de títulos para saltar ese límite.

Las posiciones al cierre no aportaban cambio alguno, dándose los habituales tanteos compradores en unos cuantos valores, algo que sucede cada día y que no influye en las sesiones siguientes.