Dos peritos aseguran que Sofico tenía un 'agujero' de 1.000 millones de pesetas

Dos peritos que declararon ayer en el juicio del caso Sofico aseguraron que el agujero, o desfase final entre la contabilidad y el dinero existente, fue de 1.002.462.524 pesetas y que hubo terrenos comprados con capital de Sofico que se colocaron a nombre de otra sociedad denominada Fimesa, lo que supuso un evasión de 700 millones de pesetas del patrimonio del holding del caballito de mar.Dos interventores Judiciales de Sofico, que también declararon como peritos, afirmaron desconocer el agujero e incluso la existencia de una caja central con la que se efectuaban los pagos de la contabilidad b (cifras reales, en lugar de las cuentas oficiales).

La sesión de ayer entró en una fase técnica en la que se trató de la contabilidad de las sociedades y (le las valoraciones de los activo; de Sofico. La defensa, y especialmente el abogado Miguel Bajo, defensor de Eugenio Peydró Brillas, dirigió sus preguntas para demostrar que el valor real de los terrenos de Sofico era muy superior a los valores contables, y que al haber, a su entender, más patrimonio que deuda no hubo estafa, achacando indirectamente la quiebra del holding a la mala gestión de la comisión liquidadora de los bienes.

Los peritos explicaron que no estaban capacitados para precisar el valor real de los terrenos, sino sólo para determinar si las cuentas estaban justificadas o no, y que de sus estudios se desprende la existencia de un desfase de dinero no justificado de 1.002 millones entre los años 1970 y 1974.

Entre los testigos propuestos por la defensa declararon varios antiguos empleados de Sofico y un miembro de la comisión liquidadora de los bienes. Todos ellos precisaron que Peydró hijo no tenía poder de decisión sobre la sociedad.

El director de explotación de Sofico, Leonardo Llorente, afirmó que había informado en varias ocasiones a Peydró padre que el coste de los servicios, el personal y los almacenajes de Sofico eran excesivos y que había que reducirlos.