Los médicos contra la guerra nuclear protestan por las pruebas atómicas

La Asociación Internacional de Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear (IPPNW), una organización que cuenta con 170.000 asociados en 50 países del Este de Occidente, ha enviado una carta al presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, protestando por la última prueba nuclear norteamericana, efectuada el pasado martes en Nevada. Paralelamente, la IPPNW ha enviado otra misiva al secretario general del Partido Comunista de la Unión Soviética, Mijail Gorbachov, pidiendo que prorrogue la moratoria sobre las pruebas nucleares, a pesar de la explosión atómica norteamericana.Ambas cartas forman parte de una campaña internacional de la asociación que tiene por objetivo ejercer presiones políticas y diplomáticas sobre las dos superpotencias para acabar con las pruebas atómicas, como primer paso para evitar una guerra nuclear y detener la carrera armamentista.

En su carta a Reagan, la Asociación Española de Médicos para la Prevención de la Guerra Nuclear señala que "un acuerdo soviético-norteamericano que condujese a un cese de las pruebas nucleares y que fuera respetado hasta que se efectuara la negociación de una prohibición definitiva de estas pruebas es el primer paso lógico y no partidista".