Bienvenido, 'mister' M'Bow

Los santiagueses compartían hace un año el desbordante entusiasmo de su entonces alcalde, Xerardo Estévez, provocado por la declaración de la ciudad como patrimonio cultural de la humanidad. Un año después ya ni se acuerdan del evento que hizo desparramar ilusiones por las calles, informa Elisardo Vázquez. Como en la película de Berlanga, el bullicio se montó para luego sólo ver muy de pasada al secretario general de este organismo, Amadou M'Bow; al vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y a las primeras autoridades gallegas. "Es un reconocimiento simbólico", sentencia el alcalde, Ernesto Viéitez Cortizo.Un año después, los efectos de esta declaración no se han dejado ver. El casco histórico y los rueiros (antiguos caminos que daban acceso a la ciudad) siguen siendo objeto de la especulación urbanística y el casco histórico no cuenta ni con un plan especial.A Segovia no llegó a ir el secretario general de la Unesco, Amadou M'Bow, debido a una pugna entre el equipo socialista municipal y el actual gobierno del Ayuntamiento, informa Aurelio Torrente. La declaración ha servido para instalar carteles anunciadores de la ciudad en las carreteras nacionales de acceso y en los folletos turísticos y para, aumentar el turismo. El casco antiguo sigue siendo un cascarón vacío y casi en ruinas, y en el papel hay poco firmado para que este problema pueda resolverse. De momento, el acueducto, monumento también declarado, sigue siendo víctima de un constante deterioro por el paso continuo de vehículos bajo sus arcos.

A Altamira aún no ha llegado la notificación oficial. Federico Bernaldo de Quirós, director de las cuevas, cree que lo ocurrido desde su declaración como patrimonio de la humanidad no revela la tutela de tan alto patrocinio, informa Jesús Delgado. "Es posible que la notificación obre en algún despacho de Madrid, pero nosotros nos enteramos al día siguiente por los periódicos. Transcurridos los meses, en la Semana Santa, nos visitó, debidamente autorizado por Madrid, un equipo de la Unesco para realizar fotos de las pinturas con intención de incluirlas en el catálogo que integran los conjuntos o monumentos considerados patrimonio de la humanidad".