El Metro denuncia a una mujer que intentó viajar con un gato en brazos

Vigilantes jurados de la Compañía Metropolitano de Madrid han presentado una denuncia contra una mujer, cuyo nombre corresponde a las iniciales M. L. F. M., por intento de viajar con un gato en el metro, provocar la detención de un tren y proferir insultos y amenazas contra diversos empleados, según un portavoz de la compañía.El incidente se inició alrededor de las dos de la tarde, en la estación del metro de Aluche, en la línea 10, cuando M. L. intentó pasar por la taquilla con un gato en brazos. La taquillera, según informó la compañía, avisó a la propietaria del animal que el reglamento de viajeros prohibe expresamente la entrada de perros o gatos, salvo que se trate de perros guías para personas invidentes.

Al parecer, la viajera se negó también a meter el animal en una de las bolsas que llevaba. Pese al requerimiento de los empleados, la mujer pasó hasta el andén y se subió en el primer vagón.

Guardas jurados de la compañía que habían sido avisados por los empleados trataron de convencerla para que se bajara del tren. M. L. profirió insultos y amenazas contra diversos empleados y vigilantes jurados del metro, según la misma fuente.

Un portavoz de la compañía manifestó: "Como la viajera se resistía a abandonar el vagón, fue necesario trasladar la cabeza del convoy hasta la cochera, donde se quedó almacenada la máquina, con la mujer como única pasajera, hasta que llegó la Policía Nacional y fue desalojada".

El resto de los viajeros -cuyo número no fue facilitado por la compañía-, tuvo que esperar cerca de 20 minutos hasta que llegó otra máquina cabeza de tren y éste pudo proseguir el viaje.

Nuevo reglamento

La Compañía Metropolitano informó que el reglamento de viajeros está colocado en lugar visible en todas las estaciones del metro. Se encuentra pendiente de ser aprobado un nuevo reglamento que también prohibe la entrada de perros y gatos. El nuevo reglamento sí autoriza, sin embargo, el traslado de animales pequeños que puedan ser transportados en recipientes convenientemente preparados para que no ensucien o molesten a los viajeros.