Acabó el campeonato

Acabó en Madrid la segunda Liga del baloncesto del cambio. Siguió el boom. Acabó la Liga de los norteamericanos, de la emoción en los últimos segundos, de los desempates (que se han puesto más de moda este año que el pasado), de los programas radiofónicos que han inundado de micrófonos todo lo que huela a baloncesto, de la Demencia convertida en hinchada susceptible de ser entrevistada, de las estadísticas, de las canchas llenas, de las entradas rozando las 1.000 pelas y de los equipos españoles luchando por las finales europeas. Acabó una Liga que ha vuelto a ganar el Real Madrid, lo que quiere decir que nada ha cambiado.Acabó una Liga que supuso un mayor incremento en las inversiones de las marcas publicitarias en este deporte, que aumentarán el próximo año a la vista de lo que se anuncia. Acabó la Liga mal para Collado Villalba, Caja de Ronda y Luckycanarias, que bajan al pozo de la Primera B; una Liga que recibe la próxima temporada a Peñas de Huesca, Claret y Manresa. Una Liga intensamente retransmitida por TVE y que ha cumplido con el espectáculo; una Liga que sabe usar el medio en su beneficio, una Liga cuyos índices de audiencia empiezan a ser sus mejores valedores. Acabó una Liga con el Real Madrid campeón, aunque sea con un susto de más, lo que quiere decir que tienen que cambiar más cosas. Acabó la Liga. Ahora viene la selección.