Los bomberos sacaron a un hombre de una chimenea con sintomas de asfixia

Los bomberos municipales sacaron ayer con síntomas de asfixia a Jesús Garoz, de 26 años, empleado del restaurante La Rioja, que estuvo durante más de dos horas dentro de la chimenea del citado restaurante, situado en las caballerizas del madrileño palacio de Liria. Los bomberos tardaron media hora en rescatarlo ya que estaba a unos 12 metros de profundidad, medio inconsciente y con magulladuras. Jesús Garoz, que es montañero, llevaba 15 días descolgándose por la chimenea, de 40 centímetros de ancho y 18 metros de largo, para llevar a cabo la limpieza de restos de hollín y placas de aluminio chamuscadas, tras el incencio producido en el local el pasado 5 de marzo.

Un trabajador del restaurante explicó que el trabajo de Garoz consistía "en deslizarse por la chimenea, que está forrada con una chapa de aluminio, y que ahora está deformada por culpa del incendio, por lo que tenía que ir serrando poco a poco el aluminio al mismo tiempo que limpiaba la chimenea".

Las mismas fuentes informaron que habían pedido infructuosamente autorización al administrador de la duquesa de Alba, Agustín Morán, para hacer arreglos en la chimenea. "Técnicos fumistas nos aconsejaron realizar unas capas o agujeros a lo largo de la chimenea como la fórmula más sencilla y menos peligrosa para llevar a cabo la limpieza, pero el administrador nos lo ha denegado sistemáticamente". Sin embargo, Agustín Morán negó estos extremos al informar que el propietario "nunca lo ha pedido formalmente".

La Rioja, puesto en funcionamiento hace ocho años, forma parte del edificio de las antiguas cocheras del palacio de Liria, que están alquiladas a más de 40 familias que también han indicado a Efe que el administrador les niega la posibilidad de mejoras en el inmueble. Los inquilinos se quejan de las goteras, de la falta de salidas en caso de incencio y de las negativas de los propietarios a permitir el arreglo de cañerías, instalaciones eléctricas y salidas de gas, a lo que el administrador de la casa rebatió afirmando "que nunca nos hemos opuesto a las normas vigentes aunque sí a las obras inconsentidas".