Catastrófico balance económico del bienio socialista, según AP

Responsables del área económica de Alianza Popular criticaron ayer, en dos conferencias de prensa, la política económica del Gobierno, calificándola de "oscurantista y carente de transparencia", en el sector agrario, y profetizando, a nivel general, tres millones de parados para el término de la actual legislatura, en octubre de 1986.Abel Matutes, vicepresidente de AP, manifestó que en noviembre de 1984 había 700.000 parados más que los que existían cuando el PSOE llegó al poder. Haciendo balance sobre el año que va a terminar, Matutes dijo que si bien el crecimiento económico alcanzará el 2%, o quizá algo más, la inflación rondará el 9,5%, la inversión descenderá 1,5% y el déficit público superará 1,4 billones de pesetas.

Abel Matutes añadió que, de confirmarse sus estimaciones sobre el índice de precios al consumo (IPC), "se habrán perdido dos años" en la lucha contra la inflación, no se habrán cumplido las previsiones gubernamentales y, finalmente, muchos de los sacrificios impuestos a los ciudadanos habrán resultado estériles.

Por su parte, Miguel Ramírez, coordinador del área de agricultura de Alianza Popular, declaró que "ha quedado patente, sin lugar a dudas, la incapacidad del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Carlos Romero, para fijar una política de futuro acorde con los intereses del sector, rechazando toda la colaboración que le ha vendio siendo ofrecida de forma reiterada por las organizaciones profesionales de agricultores, impidiendo así el cumplimiento de la prometida concertación".

Ramírez manifestó que se ha producido un importante deterioro de las rentas reales de los agricultores y que la actuación del Ministerio de Agricultura en la fijación de precios para la campaña 1983-84 fue "verdaderamente vergonzosa".