La ambigüedad

Don Fernando Morán lamentaba en Washington que el mismo entusiasmo con que Estados Unidos pretende integrarnos en la Alianza Atlántica no sea utilizado para dar a España un trato comercial equitativo y justo. En otro momento de su rueda de prensa justificó las declaraciones de Joseph Luns como un deseo de chupar un poco de cámara en los últimos momentos".Al margen de que estas consideraciones no son las que se esperan del lenguaje diplomático del máximo representante de nuestra política exterior, el caso es que no contribuirán a mejorar las relaciones con Estados Unidos ni tampoco con los demás miembros de la Alianza. Tanto si aprobamos como si rechazamos nuestra permanencia en la OTAN a través del prometido referéndum, no vamos por ello a vender más zapatos en el mercado norteamericano.

Respecto a la cuestión de fondo, la de nuestra posición respecto a la Alianza Antlántica, el paso del ministro Morán por Washington ha alimentado todavía más la confusión que existe en torno al punto clave de nuestra política exterior.

La singular posición española respecto al bloque occidental no puede ser sino el fruto de la confusión a la que el Gobierno somete a los españoles sobre un tema de tanta importancia. Ya va siendo hora de que sepamos las intenciones concretas e inmediatas de nuestro Gobierno. Cuándo se va a realizar el referéndum, qué pregunta se va a someter a votación, qué va a pasar con las relaciones bilaterales con Estados Unidos en caso de que los españoles nos pronunciemos en contra de la OTAN.

, 2 de junio