Apoyo matizado de los socialistas a la marcha pacifista de ayer en Bruselas

"¿Para quién son estas serpientes que silban sobre nuestras cabezas?" La pregunta que el dramaturgo francés Jean Racine pudo en boca de Andrómaco resurgió de los labios del presidente del Partido Socialista valón, Guy Spitaels, con ocasión de la gran manifestación contra los euromisiles, que congregó ayer a 400.000 personas, según los organizadores (120.000, según la policía), en Bruselas.La manifestación contó con el apoyo formal, pero matizado, de los partidos socialistas belgas -el flamenco y el valón-, y con el de parte notable de la Democracia Cristiana -incluida la mayoría de sus centrales sindicales- y gran variedad de organizaciones. Es de destacar la fuerte presencia del mundo político católico, especialmente flamenco.

Con el lema de No a los misiles de la OTAN y desmantelamiento de los SS-20, los manifestantes llegaron, sin incidentes de importancia, al World Trade Center, para declarar su hostilidad a todas las serpientes, pues, según Spitaels, silban "para vosotros y para nosotros". Spitaels opinó que "el movimiento por la paz es fuerte allí donde el comunismo es débil", con la excepción del "muy particular" caso italiano.

Para Spitaels, no se trataba de una manífestación contra la OTAN. "Respetamos la doble decisión de la OTAN de 1979" -él era entonces vicepresidente del Gobierno belga-, "pero pedimos un aplazamiento del despliegue y una globalización de las negociaciones sobre armas nucleares. Es demencial que a partir del 1 de enero haya en la RFA unos Pershing que puedan alcanzar Rusia en siete minutos", señaló.

En diciembre, si fracasan las negociaciones de Ginebra, comenzará el proceso de despliegue en Europa occidental de 572 Pershing 2 y misiles de crucero, un proceso que ha de durar unos cinco años. ¿Puede mantenerse la tensión que ha reinado hasta en el seno de los países miembros de la OTAN por tan largo tiempo? "La próxima vez", comentaba recientemente un diplomático occidental, "la OTAN desplegará primero y negociará después. El precio pagado por la doble decisión de 1979 ha sido demasiado elevado".

El despliegue de los misiles que le tocan a Bélgica no llegará, si llega, hasta 1985. Pero el Gobierno de coalición democristiana-liberal tendrá que tomar pronto una decisión definitiva.

Menor eco en Francia

En Francia, las manifestaciones pacifistas han encontrado un eco menor que en otros países europeos. Según informa la agencia France Presse, varios millares de personas, jóvenes en su mayoría, formaron ayer una cadenahuma na de cuatro kilómetros, que rodeó las embajadas de Estados Unidos y la Unión Soviética para protestar contra los euromisiles de ambos países.En Canadá hubo manifestaciones el sábado, en 50 ciudades, contra las pruebas de los misiles de crucero norteamericanos sobre territorio canadiense , contra la proliferación de armamentos nucleares. En Estados Unidos, fundamentalmente en Washington y Los Ángeles, hubo actos simbólicos de protesta contra las armas atómicas.