Cecil Parkinson,

ministro británico de Industria y Comercio, ha reconocido ser el padre del hijo que espera la que en otros tiempos fuera su secretaria. Parkinson, de 52 años, ha confesado en un comunicado su relación con su ex secretaria, Sara Keays, para acabar así con los rumores sobre el asunto. Aunque en un principio había planeado casarse con ella, Parkinson ha decidido permanecer con su mujer y sus tres hijas. Por otra parte, un portavoz de la oficina de la primera ministra Margaret Thatcher manifestó que no había lugar a la dimisión de Parkinson, ya que la primera ministra consideraba que se trata de un asunto privado. Parkinson fue el responsable de la campaña electoral que dio la victoria al partido conservador en las últimas elecciones y era uno de los valores en alza dentro del partido, cuya presidencia ostentaba hasta hace tres semanas. El escándalo, que ocupa los titulares de los periódicos británicos, ha resultado especialmente embarazoso al coincidir con la proximidad del congreso anual del partido conservador, lo que explicaría el cese fulminante de Parkinson como presidente del partido.