Interior insiste en que Prado se encuentra en la zona norte de Madrid

Las fuerzas de seguridad del Estado continuaron ayer controlando y vigilando, aunque con mayor discreción que en fechas anteriores, diversos barrios situados en el norte de Madrid, ya que los inspectores que investigan el secuestro de Diego Prado insisten en que tienen pistas sólidas para pensar que el financiero se encuentra en un piso de esa zona madrileña, según informaron ayer fuentes del Ministerio del Interior. Por otra parte, Manuel Prado, hermano del secuestrado, fue llamado a última hora de la noche de ayer a la Dirección de la Seguridad del Estado por motivos que no fueron revelados.

En opinión de estas fuentes, uno de los equipos policiales que en los días pasados intervino en los registros domiciliarios efectuados en los barrios citados -El Pilar, Saconia, Ciudad de los Periodistas y Dehesa de la Villa- debió estar muy cerca del escondite en el que está Diego Prado, a juzgar por informaciones policiales solventes que se poseen. No obstante, han dicho, el zulo o agujero en el que está el secuestrado debe haber sido fabricado con grandes medidas de seguridad para que no sea descubierto.Las fuentes informantes han señalado que, hasta última hora de ayer, ni la familia Prado había logrado conectar con ETA Militar ni esta organización terrorista ha hecho saber cuáles son los objetivos concretos del secuestro. Sin embargo, y a raíz de los interrogatorios realizados a los presuntos etarras detenidos en Madrid la pasada semana, se sabe que la acción de ETA fue planteada para conseguir un fuerte rescate económico.

En medios policiales encargados de las investigaciones se comentó ayer que los trabajos policiales contra los secuestradores se iniciaron tarde, ya que algunas informaciones iniciales, como parte de las facilitadas por el portero del inmueble en el que fue secuestrado Prado, no fueron ciertas. El empleado dijo, por ejemplo, que el automóvil utilizado por los secuestradores era un Seat Ritmo de color rojo o naranja, cuando, en realidad, era verde.

Bandrés pregunta

Por otra parte, el diputado de Euskadiko Ezkerra, Juan María Bandrés, opina que las autoridades gubernativas han podido incurrir en "graves infracciones de las normas procesales o, incluso, en abusos de autoridad" durante los "registros masivos e indiscriminados" que en los últimos días se han realizado en Madrid y Fuenterrabía. Por eso, ha dirigido nueve preguntas al Gobierno.

El diputado señala que "en un Estado de derecho no se puede declarar presuntamente terrorista a un pueblo o a una barriada enteros" y pregunta qué legislación concreta se aplicó para realizar los registros, y si se hicieron actas o se comunicaron al juez los registros que se efectuaron con el consentimiento de los ciudadanos. Igualmente, Bandrés se muestra extrañado por el hecho de que una persona que, en aplicación de los derechos constitucionales, solicita garantías para que su domicilio sea registrado, pueda ser considerada como "ciudadano altamente sospechoso". Finalmente, califica de "cretina" la afirmación de un comisario de policía, en el sentido de que las Fuerzas de Seguridad contaban con mandamientos judiciales de registro firmados en blanco.