Entrega de los premios a actores consagrados

Coincidiendo con el ecuador del Festival de Cine de San Sebastián, el martes se entregaron a Conchita Montes, Carmen Maura, José Sacristán y Antonio Resines las Barandillas de la Concha. Con estos galardones se pretende rendir homenaje a actores y actrices ya consagrados por el conjunto de su carrera, y a aquellos otros que apuntan como promesa.En esta ocasión, es Resines quien mayor presencia tiene en las pantallas donostiarras. Protagoniza dos películas de la sección nuevos realizadores: Siete calles, de Javier Rebollo y Juan Ortuoste, y Vecinos, de Alberto Bermejo. También interpretó un papel en Opera prima, de Fenando Trueba, que se proyecta dentro del ciclo Panorama del cine español.

Mientras se espera para el domingo la visita de Anthony Quinn y François Truffaut, nombres conocidos han hecho ya acto de presencia en el festival y otros han venido en busca de popularidad. Martin Hewitt, el ventiañero que da réplica a Brooke Shields en Amor sin fin, de Franco Zefirelli, parecía no creerse que eran para él los aplausos del público.

Otros visitantes demuestran más tablas. Mientras el director Iván Zulueta paseaba su cabellera teñida en tecnícolor por el palacio, el director Marco Ferreri se quejaba amargamente del crujido del envoltorio de un ramo de flores durante la proyección de su película.