Sin noticias del niño secuestrado en León

La policía de León todavía no había podido localizar ayer el paradero de un niño de diecinueve meses que desapareció a última hora del miércoles al ser robado en una calle de León el automóvil donde había sido dejado durmiendo por su madre.El coche apareció posteriormente en la localidad de Gordoncillo, sin que el niño, de nombre José Antonio, se encontrará en su interior. Según las primeras informaciones publicadas ayer por la Prensa local, el robo del vehículo tuvo lugar a las ocho de la noche del miércoles frente al club Pasapoga, donde la madre del niño, María Calvín Rodil, trabaja como camarera. El padre, Juan José Merino García, hizo el jueves un llamamiento a los secuestradores a través de una emisora local en el que pedía que pusieran precio al rescate, y se solicitaba, a la vez, la colaboración de todas las personas que pudieran dar noticias sobre el niño. Posteriormente se recibió una llamada anónima en la misma emisora en la que una personal que dijo tener a éste en su poder, dijo que sólo lo devolvería a cambio de dinero, sin referirse a ninguna cantidad en concreto.

Por su parte, fuentes policiales manifestaron ayer que esta llamada telefónica carecía de fiabilidad de cara a las investigaciones que se están llevando a cabo desde hace tres días y que van dirigidas, fundamentalmente, a la localización de terceras personas que puedan dar información sobre los verdaderos secuestradores. Las mismas fuentes declararon que los funcionarios de la comisaría de León trabajan ya sobre varias pistas en este sentido.

En cuanto a los móviles del secuestro, se señala que éste pudo ser debido a un error de los ladrones, que no se percataron inicialmente de la presencia del niño en el vehículo robado, o, por el contrario, a una venganza personal contra alguno de sus familiares. El coche, un R-12 de color blanco, tenía las puertas abiertas y la llave de contacto puesta en el momento de producirse el presunto secuestro.