Los fruteros reivindican la supresión de la venta ambulante

La asociación de pequeños comerciantes de frutas y verduras de Madrid ha convocado una concentración, a las nueve de la mañana de hoy, ante el Ayuntamiento, e intentará entregar un escrito al alcalde, Enrique Tierno Galván, en protesta por la ineficacia municipal a la hora de controlar y erradicar la venta pirata de dichos productos, que en las calles madrileñas se realiza en algunos mercadillos y mediante camiones ambulantes.Los pequeños comerciantes no acudirán hoy al mercado de Legazpi a abastecerse de mercancía en los puestos de mayoristas, aunque la medida no tendrá repercusión de cara al consumidor, dado que ayer acumularon productos en cantidades suficientes.

Los minoristas consideran que el Ayuntamiento no ha hecho cumplir sus propias disposiciones sobre la supresión de venta ambulante, a la que consideran como una competencia ¡legal y que les perjudica fuertemente. El Ayuntamiento, dice un comunicado de la asociación, se ceba en los minoristas, a los que impone multas por el más pequeño detalle, y, en cambio, es totalmente inútil en lo que se refiere a la erradicación de actividades que son ¡legales y que van contra los intereses de los pequeños comerciantes. Protestan también por lo que consideran como excesivas subidas en los impuestos municipales.

Los minoristas dan un plazo de diez días al Ayuntamiento para que éste ponga en práctica medidas eficaces. En caso contrario, asegura el comunicado, se repetirán las acciones de protesta, sin descartar la posibilidad de convocar una huelga indefinida del sector. Otra de las medidas de presión anunciadas consiste en salir ellos mismos a la calle, abandonando sus puestos en los mercados, y vender directamente allí sus productos. «Si el Ayuntamiento no actúa inmediatamente», afirmó ayer Alfonso García de Haro, presidente de la asociación, «le pediremos 4.000 licencias para poder ejercer la venta ambulante, en igualdad de condiciones con los vendedores piratas».

En el último pleno municipal se aprobó la adecuación de la ordenanza de venta ambulante a las disposiciones sobre esta misma materia dictadas por el Ministerio de Comercio Interior. La ordenanza permite la instalación por un día semanal de un mercadillo en cada distrito, lo que no ha sido del agrado de los pequeños comerciantes.