Heridos fortuitamente por disparos de su tío

Angel Otrera Carbonell y José García Carbonell han sido detenidos por la policía como presuntos autores de tenencia ilícita de armas y lesiones muy graves y leves, respectivamente, a dos hijos del primero y, a la vez, sobrinos del segundo. Parece ser que el hecho fue motivado por una venganza, que José quería tomar contra su hermano Eduardo. Angel y José, que acababan de salir de la cárcel, se proveyeron de un rifle y una escopeta, respectivamente, y fueron a buscar a Eduardo a la casa de éste. Al no encontrarle, comenzaron a disparar contra la chabola, acto seguido contra el aire y, por último, José arrojó el arma al suelo, momento en el que se disparó un cartucho, hiriendo a los dos niños.El mayor de ellos, de nueve años, sufre amputación de los dedos de la mano izquierda y posible pérdida de la pierna del mismo lado, mientras que el pequeño, de siete, fue asistido de lesiones leves.