El Parlamento israelí rechaza su autodisolución

La coalición gubernamental israelí superó ayer por un escaso margen de seis votos un proyecto de ley presentado por la oposición para la autodisolución del Parlamento y la convocatoria de nuevas elecciones. Momentos antes de la votación, el primer ministro, Menájem Beguin se sintió repentinamente enfermo y tuvo que ser internado en un hospital de Jerusalén.

Beguin no pudo participar en la dramática votación. Sostenido por el viceprimer ministro, Igal Yadin, con la corbata suelta, extremadamente pálido y la frente cubierta de sudor, Beguin tuvo que ser trasladado a su oficina parlamentaria, donde hay botellas de oxígeno. El primer ministro ha sufrido ya dos crisis cardiacas calificadas de ligeras.

El cardiólogo personal de Beguin, tras examinar al enfermo, ordenó su traslado urgente, en ambulancia, a un hospital. Diagnosticó agotamiento y le recomendó uno o dos días de reposo.

A pesar de la ausencia del primer ministro, la coalición gubernamental logró, como estaba previsto, vencer a la oposición, cuya moción para disolver el Parlamento fue rechazada por sesenta votos contra 54 y una abstención.

Ezer Weizman, antiguo ministro de Defensa de Beguin, y que teóricamente sigue siendo miembro de la dirección del Likud, la coalición en el poder, no participo en la votación.