Pérez Sánchez: "Joan de Joanes fue un gran testigo de su tiempo"

«Los reproches de excesiva blandura o convencionalismo piadoso atribuidos a Joan de Joanes son eco del tiempo que le tocó vivir, del que es hoy, cuatrocientos años después de su muerte, uno de los testigos más significativos», afirmó el subdirector del Museo del Prado, Alfonso E. Pérez Sánchez, en una conferencia pronunciada en el casón del Buen Retiro, bajo el título En el centenario de Joan de Joanes.

Para comprender a este pintor español, «que hoy se nos presenta como una definición de la realidad misma del siglo XVI», el señor Pérez Sánchez recalcó la necesidad de tener presente la diferente situación histórica en que vivió respecto a su padre.

Estas diferencias dé los momentos que vivieron cada uno, el padre, la época imperial de Carlos I, y el hijo, la de Felipe V, fueron de carácter sobre todo económico y religioso, según explicó Pérez Sánchez. Masip el viejo, padre de Joan de Joanes, nacido en 1475, pudo ser un artista independiente que conoció los años plenos de universal equilibrio, mientras que su hijo vivió tiempos de crisis, cambios y contradicciones, dependiendo de las presiones dogmáticas ejercidas por la Iglesia.

Alfonso E. Pérez Sánchez, que ilustró la conferencia con la proyección de diapositivas, dio a conocer el primer cuadro mitológico de Joan de Joanes que se conoce y que, en su opinión, permite pensar que, en un medio permite pensar que en un medio diferente al que vivió el artista, hubiera realizado otro tipo de pinturas. Este cuadro, que representa El juicio de París, se encontró recientemente en un museo italiano y pronto fue identificado como original de Joan de Joanes.